El malestar del campo con el gobierno de Alberto Fernández por la política hacia el sector y la falta de gestión del ministro de Agricultura, Luis Basterra, quedó reflejado en una encuesta a representantes del sector, a la que accedió Infobae, donde también se expresó la preocupación por el rumbo político y económico de la Argentina.
La encuesta fue realizada por AmplificAGRO, un equipo de profesionales que busca indagar de manera sistemática el clima de opinión en el sector agropecuario y la percepción que el mismo tiene del contexto político, económico y social que rodea al proceso productivo. Mediante relevamientos periódicos se busca monitorear las expectativas, las preocupaciones, las demandas y la mirada que hay desde el sector al contexto político y económico.
El estudio contó con la opinión de 456 responsables de decisiones en empresas y establecimientos agropecuarios pequeños, medianos y grandes (con diferentes roles accionistas, directores, gerentes y asesores), y de las áreas geográficas donde principalmente se ubica el proceso productivo agropecuario.
Al momento de preguntar sobre la realidad particular que atraviesa cada consultado, el 50,4% consideró que es positiva, mientras que un 29,7% regular y un 9,7% negativa. La percepción de la trayectoria de la situación individual de cada productor tampoco registra altos niveles de optimismo, ya que un 43% respondió que hoy está igual que hace un año atrás y un 36,4% que su situación empeoró respecto a un año atrás. Pensando en el futuro, un 42,1% consideró que su situación estará igual en un año, mientras que el 39,7% empeorará en un año.
Entre las principales demandas del sector indagadas por el estudio, la necesidad de reglas de juego claras y estables es considerada con el máximo nivel de importancia por el 92% de los consultados, seguida por la baja de la presión impositiva que fue mencionada con el máximo nivel de importancia por el 85%. Pero a la hora de definirse por una principal demanda, el 52,6% se inclinó por mencionar a la “baja de la presión impositiva” como la demanda más urgente.
En otra parte del trabajo se consultó sobre el principal problema que afecta al país, donde el 53,3% de los consultados consideró que es la Corrupción, seguido de la Inflación que fue mencionada por el 24,6% de los encuestados. Por su parte, sobre el desempeño del Gobierno de Alberto Fernández, la respuesta es mayoritariamente negativa, ya que 86,8% evaluó su desempeño como “malo” o “muy malo”.
También hay una valoración mayoritariamente negativa de las políticas agropecuarias del Gobierno nacional, siendo que el 82,9% las caracterizó como “malas” o “muy malas”. Al tiempo que el 72,4% de los consultados también evaluó como negativo el desempeño del ministro de Agricultura, Luis Basterra.
Uno de los puntos a tener en cuenta de la encuesta, con respecto al rol del Ministerio de Agricultura, es que el 90,8% de los consultados consideró que la incidencia que esta área tiene en la definición de las políticas públicas que afectan al sector es “baja” o “nula”, al tiempo que solo un 7% consideró que esa incidencia es “alta” o “mediana”.
El Contexto Económico
Con respecto al contexto económico, se desprende del estudio que el campo tiene una mirada muy negativa sobre la situación económica actual del país. El 96,5% expresó que la situación económica es “mala/muy mala”. Al tiempo que predomina el pesimismo respecto de cómo evolucionará la situación económica del país en un año, siendo que el 81,1% de los consultados sostuvo que la situación empeorará en un año.
En relación con el desempeño que el sector percibe del Ministro de Economía, Martín Guzmán, el 62,3% lo evalúa como negativo, mientras que solamente el 6,1 positivo.
Finalmente, y en relación con la predisposición a invertir en mejorar o ampliar la producción, los consultados manifestaron una tendencia “baja” o “muy baja” de invertir en este contexto económico. Sólo un 14,2% manifestó una “muy alta” o una “alta” predisposición a invertir en el actual contexto económico.
A la hora de evaluar los principales riesgos que enfrenta cada uno de los consultados en su establecimiento productivo, el 63,4% consideró que el “riesgo político” es el principal, entendiendo al mismo como a la intervención de la política en el cambio de reglas y en modificaciones impositivas y regulatorias. En segundo lugar, lejos, se menciona al “riesgo climático”, señalado por el 18,4% como un riesgo para su actividad productiva.
En lo que respecta a la relación del campo con el Estado, el 82,5% expresó que las instancias gubernamentales no tienen un buen diagnóstico de las problemáticas del sector, mientras que el 95,4% cree que el Estado no brinda una satisfactoria respuesta a las demandas del sector.
Además, el 76,3% manifestó que el sector no puede transmitir con facilidad sus demandas al sector público. El 57,9% que el Estado no considera al sector agropecuario como actor estratégico para el desarrollo del país. Y un 80,5% respondió que el Estado no es un aliado para el desarrollo del sector agropecuario.
Finalmente, y para sintetizar el clima de opinión imperante en el mundo agropecuario, en relación al contexto político y económico, a la hora de definir con una palabra la situación actual del campo, la más utilizada fue: “incertidumbre”. Al mismo tiempo, el 98% de las palabras utilizadas para describir la situación del sector fueron con connotaciones negativas, mientras que solo el 2% utilizó connotaciones positivas.
Fuente: InfoBae.