Desde el 29 de septiembre, cuando el precio doméstico de la soja disponible cotizaba a 281 dólares por tonelada, hasta el 14 de octubre (cuando cotizó a 315 dólares), la suba acumulada fue de 12 por ciento.
En el medio tuvimos la resolución del Gobierno nacional de bajar las retenciones a la soja tres puntos porcentuales y el comienzo de un foco de sequía en Brasil que tuvo un impacto muy alcista en las cotizaciones en Estados Unidos.
Esta suba de 34 dólares es el resultado conjunto de la mejora en el poder de compra de la industria aceitera, por la baja temporaria de las retenciones, y la suba que tuvo el mercado de Chicago.
Otro factor que hay que tener en cuenta, a la hora de poder evaluar cómo funciona el pensamiento de los productores, es la baja que ya muestra el mercado entre el precio de la soja disponible (315 dólares) y los precios de la soja mayo 2021 (270 dólares).
Estamos hablando de una baja de 45 dólares que, conforme vayan cayendo los días del calendario, va a terminar materializándose.
Y aquí están las preguntas del millón: ¿qué pasará de aquí al ingreso de la nueva cosecha de soja?, ¿el disponible bajará al nivel del futuro?, ¿o la soja futura subirá a los niveles del disponible?
También cabe preguntarse si es posible que el precio de la soja se sostenga en el tiempo en estos niveles, o si por el contrario existe cierta probabilidad de baja.
Si analizamos las distintas variables y factores del mercado vemos en primer lugar que la industria aceitera tiene márgenes de molienda positivos, por primera vez en mucho tiempo.
Para octubre, el margen es positivo entre cinco y 10 dólares por toneladas dependiendo de la tecnología de extrusión en el proceso de extracción de aceites y harinas.
Sin embargo, los márgenes de molienda para los meses de noviembre y diciembre resultan negativos entre ocho y 15 dólares por tonelada.
Uno de los factores que influyen en este comportamiento es el aumento gradual de las retenciones al poroto de soja, que el Gobierno dispuso para esos meses y así regresar al nivel original del 33 por ciento en enero de 2021.
Para la soja de la nueva cosecha, si se considera un precio de 270 dólares por tonelada para mayo 2021, los márgenes de molienda también son negativos entre 12 y 16 dólares por tonelada. Al proyectar estos márgenes negativos significa que la industria aceitera pierde plata, si compra la soja a 270 dólares y luego vende el aceite y la harina al precio actual de mercado. En concreto, lo que estamos diciendo es que, tanto el precio de la soja disponible como la de mayo 2021, tienen ciertas chances de entrar en una potencial tendencia bajista.
Otro factor que va a influir en la debilidad o fortaleza del dólar en el mundo es el resultado de la elección a presidente de los Estados Unidos. De ser reelecto Donald Trump o de ganar Joe Biden, el futuro del dólar va en direcciones opuestas. Hoy la debilidad de la moneda estadounidense es un importante factor de mercado. Permite a las grandes potencias importadoras de alimentos y commodities agrícolas poder tener con su moneda, sean euros o yuanes, una paridad con el dólar más favorable.
Por último, dejamos en el productor la decisión de vender su soja disponible o no. Sólo advertimos que hoy el mercado tiene más para bajar que para subir.
Por Pablo Adreani.
Fuente: Agrovoz.