La próxima campaña fina de granos 2021/22, pronta a comenzar, ocupará una mayor superficie que la registrada en el ciclo actual, gracias a que se espera un crecimiento en el área de cebada, mientras que la de trigo se mantendría sin cambios en 6,5 millones de hectáreas.
Así lo estimó el economista jefe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), Agustín Tejeda Rodríguez, en diálogo con Télam, tras señalar que pese al aumento de precios internacionales del trigo, los incentivos de producción recaen en otros cultivos, como la cebada o granos gruesos, debido a que sus incrementos en los últimos meses fueron mayores.
«Lo que vemos es que el escenario en torno a la fina es distinto al que teníamos el año pasado. En ese momento la pandemia había afectado de una manera particular a los granos (con bajas de precios) y el trigo era el que había resistido más, por particularidades del cultivo, como ser clave en la dieta de la mayor parte de los países del mundo y tener una elasticidad de ingresos más baja», indicó Tejeda Rodríguez.
En base a este panorama, el economista sostuvo que «el año pasado había un verdadero incentivo, pero este año todos los precios aumentaron, pero los de los otros granos subieron mucho más».
Entonces, añadió, «si bien el trigo tiene mejores precios que el año pasado, ha perdido competitividad respecto a las otras opciones. Por eso es que no damos una expansión y esperamos que el productor se vuelque a esas otras opciones».
Según datos de la BCBA, en la campaña 2020/21 de trigo se sembraron 6,5 millones de hectáreas y se produjeron 17 millones de toneladas.
Cabe mencionar que si bien el tonelaje cosechado se encuentra entre los mejores de los últimos años, la expectativa era de alcanzar un récord y algunas entidades hasta pronosticaron potenciales producciones de 21 millones de toneladas.
Pero la fuerte sequía que afectó a la región norte y central del área agrícola nacional desde mediados de año dio por tierra esas posibilidades y la cosecha finalizó 1,8 millones de toneladas por debajo de lo obtenido en la campaña 2019/20.
Tejeda Rodríguez explicó que no se prevé un movimiento en el área de trigo para el ciclo venidero, aunque sí se esperan cambios en la distribución de la siembra.
En este sentido, el especialista señaló que «va a haber una recuperación en el centro del país, sobre todo en áreas que no habían logrado sembrarse por el escenario seco que enfrentó la zona, en especial en Córdoba, el NOA y el NEA. Ahí esperamos que el trigo recupere área».
Caso contrario ocurrirá en la zona núcleo agrícola, donde la entidad proyecta que la cebada, la cual se posiciona como más competitiva que el trigo, «le va a ganar espacio».
«El año pasado fueron 900.000 hectáreas las que se sembraron y lo que esperamos es que haya un incremento importante en el área de cebada, porque el precio subió un 50% respecto al año pasado. Si el clima lo permite, vamos a tener un buen crecimiento en la superficie», explicó.
«El escenario de precios internacionales es muy favorable, como no veíamos por lo menos desde hace siete años. Eso incentiva las decisiones de siembra y de incorporación de tecnología de todos los cultivos. Para la fina, en particular, sobre todo para las perspectivas que está brindando la cebada, va a ser un año de expansión», comentó Tejeda Rodríguez.
«Ahora bien, más allá de un escenario favorable en precios, después hay que ver si el clima acompaña. Lo que va a marcar el aprovechamiento del escenario internacional va a ser la propia situación doméstica de Argentina, en términos de cuáles son las expectativas que existen en el productor en torno a las reglas de juego para la próxima campaña. Ahí vamos a ver si todo ese potencial del escenario internacional se termina concretando», concluyó.
Respecto de las condiciones climáticas, el adelanto del informe de pre-campaña que publicó la Bolsa de Cereales porteña proyecta que se irá hacia un escenario de neutralidad, por lo que el régimen de lluvias tendría que ser el normal para esta parte el año, al mismo tiempo que se presume buena humedad en suelo a la hora de comenzar los trabajos de implantación.
Fuente: Agritotal.