La siembra de soja en la Argentina está a un paso de finalizar: restan por incorporar apenas unas 200.000 hectáreas sobre el total de 16,2 millones de hectáreas.
Las lluvias recientes mejoraron la situación del cultivo en algunos sectores y ahora el 54% del área está en situación mala a regular versus un 60% una semana atrás. Algo es algo.
Con respecto a los cuadros de soja de primera –según indicó este jueves la Bolsa de Cereales de Buenos Aires– un 13,3 % de la superficie se encuentra iniciando el período crítico (R3-R6).
“Los cuadros más adelantados se concentran en la zona núcleo pampeana, el sur de Córdoba, el norte de La Pampa y el oeste de Buenos Aires, donde se esperan mermas sobre los rendimientos potenciales como consecuencia de las altas temperaturas y la falta de humedad en los perfiles durante la primera mitad del ciclo del cultivo”, apunta el informe de la Bolsa de Cereales.
En lo que respecta a la soja de segunda, un 57,3% del área reporta una condición de cultivo regular a mala, aunque durante los próximos días se esperan precipitaciones sobre importantes sectores del área agrícola que podrían contribuir a mejorar el escenario para el cultivo.
En cuanto al maíz, a la fecha ya se logró sembrar el 94% de las 7,10 millones de hectáreas proyectadas para la campaña en curso. “A pesar de transitar las últimas semanas de la ventana de siembra, los productores aprovechan la mejora en la disponibilidad hídrica para extender las incorporaciones del cereal”, remarca el informe.
Las precipitaciones recientes, aunque mejoran las perspectivas de los planteos tardíos del cereal, no permiten mejorar la condición de los cuadros tempranos en las provincias de Santa Fe y Entre Ríos, donde el estrés termo-hídrico sufrido por el cultivo ya no tiene vuelta atrás.
En el sector norte de la zona pampeana se indica que “lamentablemente parte de la superficie de maíz temprano se está destinando al picado con el objetivo de generar reservas forrajeras para el ganado, especialmente el lechero”.
La situación hacia el norte del área agrícola argentina es diferente, ya que las lluvias mejoran las reservas hídricas para la siembra de los últimos lotes destinados al maíz.
Por último, las labores de recolección de girasol cubren ya el 15,8% de la superficie nacional con un rinde promedio de 15,2 qq/ha. Los mayores progresos se registran sobre el centro-norte de Santa Fe. Paralelamente, comenzó la cosecha en Entre Ríos y el norte de la zona núcleo pampeana con rindes menores a los esperados.
Por Valor soja.
Fuente: Bichos de campo.