La feroz sequía de tres campañas consecutivas no termina de retirarse de la Argentina. En agosto, según detalla un informe reciente de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las precipitaciones estuvieron ausentes en gran parte del centro y oeste del país, y el margen para la recomposición de humedad en los perfiles se achica de cara a la próxima siembra de cultivos de verano.
«Agosto volvió a dejar fuera la posibilidad de que la franja oeste de la región pampeana se recomponga. Las reservas de agua, actualmente, se presentan muy similares a las del año pasado, con requerimientos de agua superiores a los 110 milímetros. También la extensión geográfica de la falta de agua del oeste es similar a lo que sucedía a finales de agosto del 2022», describe la entidad, y advierte que no hay pronósticos de lluvias para esas zonas hasta fin de mes.
Una buena para el campo
Pero la buena noticia para el sector es que el fenómeno Niño ha vuelto a fortalecerse, cuando hace un mes atrás se hablaba de debilitamiento y había pasado de fuerte a moderada su intensidad.
El consultor meteorológico Eloy Elorriaga, citado por la BCR, señala: “Finalmente, el océano y la atmósfera se están acoplando y hay una firme tendencia de las variables que hacen efectivo el transporte de humedad adicional para que llegue desde el Pacífico al territorio argentino”.
Con los últimos datos actualizados de la NOAA y otros organismos internacionales es posible afirmar que “las variables oceánicas y atmosféricas aumentaron su interacción. Aunque la atmósfera aún no está completamente acoplada, el sistema océano-atmósfera reflejó que las condiciones de El Niño, previamente debilitadas en el Pacífico ecuatorial centro-oriental, se han fortalecido gradualmente durante agosto 2023”.
«Respecto a lo que se proyectaba un mes atrás, esto significa que hay un nuevo cambio de tendencia que va a favor de las lluvias en Argentina tras la feroz sequía del año pasado. La intensidad en el fenómeno del Niño que se establecía como moderada hace un mes se proyecta que será entre moderada y fuerte, como se proyectaba en junio», destaca la entiodad rosarina.
Y Elorriaga remarca: “Es muy importante que el productor sepa que este acoplamiento se va a traducir en que el agua llegaría antes de lo que proyectábamos hace un mes. El forzante (el Niño) se está volviendo más eficiente, y no solo que podría actuar antes, sino que se fortalecen las probabilidades de contar con lluvias por encima de lo normal durante la campaña gruesa argentina”.
Fuente: Clarín Rural.