Los granos cerraron con saldo dispar en el mercado de Chicago tras la publicación del informe de oferta y demanda mundial del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), que recortó la estimación de exportación de soja de dicho país y se elevó la previsión de cosecha de maíz por encima de lo esperado por los operadores.
El contrato de septiembre de la oleaginosa cayó 1,53% (US$ 7,62) hasta los US$ 489,33 la tonelada, a la vez que en noviembre lo hizo por 1,64% (US$ 8,27) para posicionarse en US$ 494,75 la tonelada.
Los fundamentos de la baja radicaron en el recorte en las estimaciones de las exportaciones de Estados Unidos para campaña 2023/2024 por parte del USDA.
El organismo las proyectó en 48,72 millones de toneladas, casi 2% por debajo de los 49,67 millones de agosto y 10% por detrás de los 54,16 millones vendidos en el ciclo 2022/2023.
Sus subproductos acompañaron la tendencia del poroto, con una caída de 1,65% (US$ 7,50) en la harina hasta los US$ 446,65 la tonelada, mientras que el aceite perdió 0,68% (US$ 9,48) para ubicarse en US$ 1.382,72 la tonelada.
En tanto, el maíz bajó 1,69% (US$ 3,15) y se ubicó en US$ 182,37 la tonelada, debido a que el USDA elevó de 383,83 a 384,42 millones de toneladas su proyección sobre la cosecha de Estados Unidos, frente a los 381,22 millones previstos por los privados en los días previos a la publicación del nuevo trabajo oficial.
Por último, el trigo subió 0,76% (US$ 1,56) y cerró las operaciones a US$ 205,86 la tonelada, como consecuencia de que el USDA proyectó una menor oferta en el nivel mundial en la campaña 2023/2024.
«Sin cambios en las cifras respectivas a Estados Unidos, como lo estimaban los operadores, el organismo elevó su cálculo sobre las exportaciones de Rusia, de 48 a 49 millones de toneladas, también incrementó las ventas de Ucrania, de 10,50 a 11 millones, y de Kazajstán, de 9,50 a 10,50 millones», puntualizaron desde la corredora de granos Granar.
Fuente: Clarín Rural.