Desde el viernes pasado, la región agrícola núcleo registró significativas precipitaciones, algunas de las cuales superaron los 140 milímetros. Si bien estas lluvias son beneficiosas para mejorar la disponibilidad de agua en el suelo en áreas con déficit, así como para preparar los suelos para el trigo, para diversos expertos consultados representan una alerta para la cosecha de soja. Ya se han reportado excesos con efectos negativos en los cultivos. Y hay inquietud sobre cuándo será posible volver a ingresar a los lotes para continuar con la recolección de los cultivos.
Según un informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, hasta el jueves pasado, antes del frente de tormentas, se llevaba cosechada apenas el 10,6% del área apta con soja. De acuerdo a esta entidad se espera que se recolecten en total 17,2 millones de hectáreas. Por el lado del maíz, en tanto, ya se cosechó el 15,3% de una superficie total que se espera levantar de 7,1 millones de hectáreas.
En la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) indicaron que estas lluvias son producto de un centro de baja presión atípico y muy estacionario sobre el centro del país, lo que ha modificado los patrones de precipitación habituales en la región. El fenómeno dejó acumulados que superaron los 70 mm en gran parte del área, llegando incluso a más milímetros. Al respecto, en Monte Buey y Guatimozín se registraron 140 y 128 milímetros, respectivamente, mientras que Godeken y Junín marcaron 120 milímetros cada localidad.
“Lo que está pasando es algo muy atípico. Hay un centro de baja presión que está muy estable, muy estacionario y está posicionado sobre el centro del país. Lo atípico es que se ha metido más hacia el oeste del centro del país cuando en general suele tener una posición más sobre el Río de la Plata”, sostuvo Cristian Russo, jefe de estimaciones agrícolas de la Bolsa rosarina.
Russo señaló que estas lluvias continuas plantean problemas, especialmente para la cosecha de soja. “Hace menos de dos semanas hubo lluvias en el este de la región que superaron los 350 mm. Esta situación, sumada a la incertidumbre sobre cuándo mejorarán las condiciones para que los cultivos se sequen, genera preocupación. Específicamente, preocupa tanto el exceso de agua que quedó del mes pasado en algunos lugares, especialmente en el este de la región, como la necesidad de crear las condiciones adecuadas para secar esta gran cantidad de agua y humedad acumulada. Esta situación genera inquietud, especialmente al observar síntomas de plantas de soja que no terminan de secar, que hay retención de hojas y que se vieron algunos problemas por falta de calidad en algunas zonas”, dijo.
Carlos Zotelo, climatólogo del Conicet, indicó que con estas lluvias de los últimos días quedó solucionado el déficit de humedad en el suelo que había en ciertos lugares de la zona núcleo, como Junín y Pergamino. Sin embargo, señaló que el exceso de lluvia tampoco es bueno porque no logra ser absorbida por el suelo y se pierde por escorrentías. “Por lo general, cuando llueven más de 50 mm, el terreno no puede absorberlo por completo y se pierde. A pesar de esto, estas precipitaciones han contribuido significativamente a mejorar las recargas de humedad, especialmente en zonas de Córdoba donde estas eran deficitarias”, explicó.
En tanto, en la región de Chaco se registraron lluvias en exceso, con acumulados que superaron los 120 milímetros en muchos casos. También el sur de Corrientes, el centro sur de Entre Ríos y el litoral de Santa Fe fueron afectados por este fenómeno. En estas áreas se prevé que estas condiciones se mantengan durante la jornada de hoy y, posiblemente, mañana.
En cuanto al escenario futuro, indicó que se espera una disminución en la cantidad de lluvias. “Después de este sistema, entraremos en una fase más estable en términos meteorológicos, lo que implicará una reducción en el ritmo de precipitación”, apuntó.
En la misma línea, el meteorólogo Leonardo De Benedictis dijo que partir de mañana se producirá un cambio en las condiciones climáticas. “Hoy todavía tendremos lluvias y tormentas de variada intensidad, principalmente en la parte central del país”, indicó. “A partir de mañana este sistema comenzará a retirarse, y así tendremos un martes, miércoles, jueves, viernes y sábado con condiciones climáticas más estables. Sin embargo, será a partir del próximo domingo cuando podríamos volver a experimentar algo de inestabilidad climática. Por ahora, lo más destacado es la continuidad de las lluvias durante el día de hoy y la presencia de viento intenso mañana. Este viento del sudoeste, justamente va a limpiar todo este sistema, afectando gran parte del territorio nacional”, agregó.
Desde Colón, Buenos Aires, el productor Germán Millet informó que en la zona se acumularon entre 100 y 130 mm de lluvia en los últimos cuatro días. “Veníamos muy apurados con la cosecha de soja. Algunos lotes estaban más secos y los rendimientos han sido muy buenos, entre 35 y 55 quintales”, expresó. Luego se refirió a una complicación: “Como la planta estaba verde y el grano tenía un contenido de humedad de entre 12 a 13%, las máquinas iban muy despacio y los contratistas tuvieron muchas complicaciones al no poder ir a la velocidad normal. Después de esto, creo que las cosas se van a emparejar; vamos a estar desesperados por cosechar”.
Pilar Vazquez
Fuente: La Nación Campo.