El Banco Central resolvió eliminar la sobre tasa bancaria del 20% que regía para los productores de soja que mantenían un 5% de su cosecha, en un gesto hacia el mercado en medio de la suba de las cotizaciones del dólar y discusiones sobre el ritmo de venta de granos en esta campaña.
La normativa fue establecida en septiembre pasado, durante el gobierno de Alberto Fernández, y había sido prorrogada por la administración Milei en diciembre de 2023, con un plazo de vigencia previsto para fines de este mes.
El sentido que tuvo desde el principio fue incentivar la liquidación de divisas, a través de un castigo a quienes no vendieran toda la cosecha. El tándem Sergio Massa, como ministro de Economía, y Miguel Pesce, como titular del Banco Central, la impulsaron para captar todas las divisas posibles.
Y sus sucesores, Luis Caputo y Santiago Bausili, decidieron mantenerla hasta ahora, en un contexto en el que la prioridad del equipo económico ha sido ordenar el frente financiero.
Sin embargo, este miércoles decidieron revisar la medida. “Esta decisión constituye un paso más en el camino trazado por el BCRA con miras a normalizar el funcionamiento del sistema financiero y fomentar el crédito doméstico al sector privado productivo”, explicaron en un comunicado oficial del BCRA.
Destacaron que la entidad regulatoria bancaria “no renovará regulaciones distorsivas que discriminan la expansión del crédito al sector agropecuario”.
La Mesa de Enlace venía reclamando por la eliminación de esta normativa desde hace varios meses y este miércoles, a 4 días del vencimiento, difundieron un comunicado en el cual la consideraron “una de las medidas más injustas aplicadas en los últimos años, un castigo más a quienes producen, crean empleo genuino, desarrollan el interior y generan divisas en la Argentina».
Las 4 entidades gremiales de los productores sostuvieron que «va a contramano de la desregulación y la liberación económica pregonada por la actual administración nacional». Incluso, pese al apoyo general que le dan al Gobierno, dijeron que en este tema se sentían decepcionados con Javier Milei.
En ese sentido, juzgaron como “inadmisible que se continúe aplicando una medida copiada del kirchnerismo que sólo conlleva discriminación y hasta ignorancia”.
Voceros del Banco Central pusieron en consideraron que “esta adecuación normativa complementa otras medidas como la Comunicación A8043 del pasado 13 de junio, que flexibilizó las normas de crédito para el conjunto de entidades que califican como Grandes Empresas Exportadoras (GEE). En esa ocasión, se eliminaron restricciones al financiamiento en moneda extranjera, junto a otras actuaciones flexibilizadoras”.
Y aseguraron que “a medida que el BCRA avanza en la recuperación de la estabilidad macroeconómica, sus autoridades seguirán evaluando opciones para flexibilizar regulaciones distorsivas y discriminatorias, con el fin de facilitar el redireccionamiento del crédito bancario desde el sector público al sector privado productivo”.
El reclamo de la Mesa de Enlace, Acsoja y la Bolsa de Cereales
La Asociación de la Cadena de la Soja (ACSOJA) también solicitó la “derogación definitiva de una medida financiera que atenta contra el desarrollo de todo el sector”.
La entidad presidida por el prestigioso genetista Rodolfo Rossi enfatizó que “el crédito es fundamental para el desarrollo de la actividad productiva y no facilitar el acceso a esta herramienta impacta negativamente en el potencial de producción, restringiendo la inversión”.
También José Martins, presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, celebró la baja de la reglamentación que discriminaba el crédito para el sector agropecuario.
Consideró que era normativa «injusta que castigaba la producción agrícola. Es una buena señal, que sumada a otras medidas que desregularon actividades o removieron barreras, indican que estamos en un camino positivo”.
El reclamo de la Mesa de Enlace se planteó como la oportunidad de “subsanar un grave error que resulta arbitrario y desconocedor de las costumbres y operatorias del mundo agropecuario como lo es acopiar parte de su producción para hacer frente a las obligaciones y futuras campañas».
En el marco de la discusión sobre el ritmo de liquidación de la cosecha, indicaron que «la venta de granos está en línea con los años anteriores» y destacaron que los productores agropecuarios no utilizan sus granos de manera especulativa, simplemente guardan parte de su producción como reaseguro, ahorro y hasta forma de pago».
Por lo cual, en directa alusión a la referida normativa del Banco Central, opinaron que eliminarla sería un aliciente. «El campo necesita gestos y deberá ratificarse con la quita total de las retenciones -siempre dentro de un esquema razonable- y la eliminación de los impuestos País y al Cheque», concluyeron.
Fuente: Clarín Rural.