“Los principales perjudicados con el aumento en las retenciones de la harina y el aceite de soja serán los productores, quienes verán reducidos sus ingresos en el orden de los 400 millones de dólares anuales”.
Así lo estimó un informe elaborado por el analista de mercados agrícolas y consultor Pablo Adreani en referencia al proyecto oficial que pretende aplicar –en el marco de un aumento impositivo destinado al agro– una suba de la alícuota de los derechos de exportación a la harina y aceite de soja, que pasarían, si la propuesta finalmente es aprobada en el Congreso, del 31% al 33%.
“El precio de compra de la soja por parte de la industria aceitera podría bajar entre 9 y 11 u$s/tonelada para poder compensar de esa forma los mayores costos de exportación que surgen de aumentar las retenciones de la harina y del aceite de soja”, indica Adreani.
Gran parte de ese fenómeno ya comenzó a observarse en el mercado de futuros de la soja argentina (Matba Rofex), donde el contrato Soja Rosario Mayo 2024 experimentó una caída considerable desde que se anunció la intención de instrumentar el aumento de derechos de exportación. Tal caída es proporcionalmente mayor al ajuste de los valores FOB del poroto y la harina de soja argentina.
“Actores del sector festejan la eliminación del diferencial arancelario de las exportaciones del complejo soja sin analizar el impacto negativo en los márgenes de molienda de soja que dicha medida ocasiona”, aseguró el analista.
“Números estudios económicos, financieros e impositivos han demostrado el impacto negativo y el aumento de los costos de elaboración del aceite y la harina de soja en el proceso de molienda cuando se anula el diferencial del 2% entre los productos y subproductos resultantes de su elaboración.”, añade.
Adreani además dijo que la mejora de competitividad relativa del sector exportador de poroto podría promover un incremento adicional de la oferta exportable potencial de grano sin procesar del orden de 3,0 millones de toneladas. “Si eso ocurre, la única forma de competir con la oferta de soja de Brasil, que exporta anualmente 100 millones de toneladas de poroto de soja, es bajando los precios FOB de exportación de soja Argentina”, alerta.
La contraposición de ese incremento sería una menor oferta disponible de soja para industrializar en el territorio argentino, que podría ser compensada con la importación de poroto de soja proveniente de países vecinos si las paridades de precios, por supuesto, son las adecuadas para poder instrumentar esa operatoria.
Fuente: Bichos de campo.
Por Valor soja