Luego de la presentación en el Congreso por parte del presidente Javier Milei del proyecto de ley de presupuesto para 2025, se conoció que la secretaría de Agricultura, hoy a cargo de Sergio Iraeta, tendrá un 297% más de recursos que hace dos años. Para 2023, el último presupuesto aprobado, la cartera agrícola manejó 105.978 millones de pesos, mientras que en 2025 tendría $421.248 millones. En el caso de los entes descentralizados de esa dependencia, se prevé aumentos en promedio en más de un 400%.
Respecto del Senasa, uno de los entes descentralizados, el presupuesto proyectado es un 329% mayor que 2023. De 39.903 millones de pesos en ese momento pasó a $171.157 millones para 2025. En otras palabras, ese organismo va a manejar $131.254 millones más que hace dos años. Todos estos datos surgen del análisis realizado por el equipo económico del diputado radical cordobés, Luis Picat. LA NACION buscó tener de fuentes oficiales una opinión sobre el presupuesto 2025 en las distintas dependencias ligadas a Agricultura.
Desde que asumió el gobierno de Javier Milei, uno de los objetivos siempre fue achicar el Estado a partir de los ajustes, por ejemplo, en personal. El Senasa era uno de los organismos en la mira y el Gobierno planeaba despedir 1150 empleados. Allí el gasto en personal en 2025 será de $126.288 millones, mientras que en el 2023 este valor ascendió a los $32.004 millones. Esto es un 295% más que la versión anterior presupuestada. Esto en términos nominales son $94.284 millones más que hace dos años, según el reporte de Picat.
En el organismo sanitario, el gasto en el personal permanente pasó de $6866 millones en 2023 a $30.418 millones para 2025, es decir, un 343% más. En el personal temporario trepó de $43 millones a $258 millones, un 500% más. Una particularidad es que, en el caso de los beneficios y compensaciones se fue de los $61 millones a $769 millones, 1161% más que hace dos años.
En tanto, en los bienes de consumo, cuya partida contempla los “textiles y vestuario”, esta se redujo un 43%. Pasaron de $391 millones a $222 millones para 2025. En el mismo escenario están las “construcciones”, que cayeron un 56%. Estas pasaron de contar con un presupuesto de $472 millones a $206 millones.
Por otra parte, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) pasaría el próximo año a contar, si es aprobado el presupuesto, con $251.494 millones, un 450% adicional a 2023 o una diferencia nominal en este caso de $205.807 millones. En gastos en personal, la partida es un 468% superior al último presupuesto que había manejado ese organismo. Así, pasará a tener el año próximo $192.622 millones contra los $33.929 millones. Se trata de $158.693 millones más para este fin.
Fuentes ligadas al organismo aclararon que, en este caso, se está comparando el presupuesto 2023 que, a su vez, tuvo refuerzo presupuestario por paritarias e inflación, lo mismo que el 2024. Por tanto, todo está en base con los ajustes y por debajo de la inflación. Vale aclarar que la inflación acumulada del año pasado fue del 211,4%, según el Indec.
El Instituto Nacional de Semillas (INASE) el próximo año contará con un presupuesto 746% superior al de hace dos años. Pasará de los $2573 millones a $21.760 millones. Esto es $19.187 millones más. En gastos de personal serán 6895 millones de pesos, es decir, $5922 millones más que hace dos años, con una variación del 609% superior.
En este marco, respecto del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) la partida del próximo año será de $16.420 millones contra los $2834 millones de hace dos años. En términos porcentuales, la diferencia es de un 479% superior al presupuesto del 2023 o $13.586 millones más.
El gasto en personal del INV pasará de los $2198 millones a los $13.912 millones en 2025, un aumento de $11.714 millones o un salto del 533%. Entre los movimientos y cambios que realizó el Gobierno se observa que el personal contratado pasó de $14 millones a los $1574 millones para el 2025. Esto es un 11.143% superior. En ese organismo hubo una reducción en el “Gabinete de autoridades superiores” que fue disuelto en un 100%.
Los organismos descentralizados del Estado, si bien manejan financiación propia, que por ejemplo sale de cobros que hacen por prestaciones, algunos como el INASE y el INTA tienen partidas presupuestarias que cubre el Estado. Según dijeron, en tanto el Senasa es uno de los organismos superavitarios con excedentes en su recaudación todos los años.